Leonardo:
¡Qué vidrios se me clavan en la
lengua!
Porque yo quise olvidar
y puse un muro de piedra
entre tu casa y la mía.
Es verdad. ¿No lo recuerdas?
Y cuando te vi de lejos
me eché en los ojos arena.
Pero montaba a caballo
y el caballo iba a tu puerta.
Con alfileres de plata
mi sangre se puso negra,
y el sueño me fue llenando
las carnes de mala hierba.
Que yo no tengo la culpa,
que la culpa es de la tierra
y de ese olor que te sale
de los pechos y las trenzas.
Novia:
¡Ay que sinrazón! No quiero
contigo cama ni cena,
y no hay minuto del día
que estar contigo no quiera,
porque me arrastras y voy,
y me dices que me vuelva
y te sigo por el aire
como una brizna de hierba.
He dejado a un hombre duro
y a toda su descendencia
en la mitad de la boda
y con la corona puesta.
Para ti será el castigo
y no quiero que lo sea.
¡Déjame sola! ¡Huye tú!
No hay nadie que te defienda.
1.- Preguntas de
comprensión:
a)
¿Cómo se sienten los personajes del fragmento?
b)
¿Qué imágenes utiliza Leonardo para expresar su estado de ánimo?
c)
¿De quién es la culpa, según Leonardo? Trata de explicarlo.
d)
¿Cómo explicas que la novia haya dejado atrás toda las descendencia de su marido?
e)
¿Qué le pide a Leonardo?
2.-
Elige una de los dos parlamentos y divídelos en partes; justifica y resume.
3.-
Analiza métricamente este fragmento.
4.-
Identifica: anáforas, encabalgamientos, polisíndeton, hipérboles, paradoja, elipsis,
metáfora, paralelismo, comparación.
5.-
Localización:
a)
¿En
qué acto situarías esta escena y por qué?
b)
¿Qué
ocurrirá después?
6.-
Estructura de estas palabras extraídas del texto:
a)
Duro:
b)
Montaba:
7.-
Analiza sintácticamente estos fragmentos:
a)
Cuando
te vi de lejos me eché en los ojos arena.
b)
Me
dices que me vuelva y te sigo por el aire.
c) No
hay nadie que te defienda.